Hasta el siglo XIX, los trabajadores, en general, y, sobre todo, los que tenían los empleos más precarios, trabajaban todos los días del año, salvo festividades muy concretas, con jornadas de 10 a 18 horas diarias (de sol a sol).
No es hasta principios del siglo XX cuando el Gobierno establece la prohibición de trabajar los domingos.
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| D. Antonio Maura. Presidente de Gobierno. Archivo de Wikipedia. |
D. Francisco Medina lo explica en un artículo de su blog que puede encontrar en el siguiente ENLACE.
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