Hoy vamos con otra palabra escrita en un acta de la Corporación Municipal, que también me llamó la atención, y que demuestra la sabiduría que tenían estas personas de principios del siglo XX, en una población que no llegaban a 9.500 habitantes, dedicados a la agricultura y pesca, sin una preparación adecuada y que su buen hacer era único.
Acta de fecha 5 de Diciembre de 1.910: Se acuerda el pago por varios conceptos. Veamos uno de ellos: " A Don Gaspar Hoyos González, Maestro de Obra Municipal, de jornales invertidos en recorrer los tejados de la Casa Consistorial, 72 pesetas".
Cualquiera diría: "yo me apunto a ese trabajo", me subo en una escalera, llego al tejado, doy una vuelta y a cobrar. Pero no es así, porque la experiencia en estos temas nos dice que hay algo más dentro de esa palabra "recorrer".
Y ya nos deja mas extrañado otra Acta, la del 28 de Agosto de 1.908: " A Don Antonio Vázquez Rodríguez, Maestro de Obras Municipales, importe de los jornales invertidos en recorrer los tejados y solería de la Casa Capitular, 30 pesetas".
¡No te lo puedes creer!
¿Por pasearte por la planta del Ayuntamiento?
¡Pues no! Recorrer, teniendo en cuenta que este edificio adolecía de numerosos fallos de construcción, vistos a lo largo de los años: problema de cubierta, asiento de parte del edificio, etc., ese trabajo no era una simple visita, era revisar el estado de la cubierta y de la solería y reparar los defectos que tuviesen, principalmente no solamente el tejado, sino la estructura de madera que la sustentaba.
Autor: Andrés Cintrano Fernández